sábado, 11 de abril de 2009

Entre viento fuerte y aire bueno

Sin tiempo para decir ¡Casa! el juego continúa y en menos de 24 ya estaba de vuelta en el avión. La semana de Fuerteventura pasó como vino, volando en viento con fuerte olor a sal, mojo picón y toneladas de pescado. Mucha playa, mucho sol (no ha sido la primera vez en mi vida que me torno cangrejo, ni será la última, me temo) y millones de fotos. Han sido unas vacaciones "especiales" por aquello de que era la primera vez que íbamos con el pack de "vuelo+hotel" y bueno... la experiencia da para un post futuro sobre turismo sostenible que promete ser interesante.



En cualquier caso lo hemos pasado muy bien, hemos comido mejor y hemos disfrutado de los vientos y las playas.
Vuelta al avión -> Llega a Madrid -> Llega a casa con invitados -> Deshaz la maleta -> Pon la lavadora con lo que te quepa -> Duerme como puedas -> Haz la maleta -> Métete de nuevo el avión -> Apáñate como veas las 13 horas de vuelo -> Y llegamos a Buenos Aires!!
Todo en menos de 48 horas.

Y aquí, pues promete, ya visto la Casa Rosada, y esta noche me espera un asada en casa de compañero de Couch Surfing.

La experiencia creo que puede ser prometedora.

Saludos,
Miguel